En este artículo:
- ¿Cómo funciona una caldera?
- ¿Cuáles son los 5 beneficios de las calderas de calefacción central?
- Recomendaciones
Ya sea porque se acerca el invierno o porque estamos construyendo nuestra vivienda o porque queremos renovar un sistema de calefacción obsoleto, nos encontramos frente a la difícil decisión de definir por qué sistema de calefacción nos vamos a inclinar. Una de las propuestas a considerar será, sin lugar a dudas, pensar en calderas y sistemas de calefacción centralizados.
¿Qué es una caldera? La Real Academia Española (RAE) define caldera como “un recipiente, por lo general metálico, que se utiliza para el calentamiento o la evaporación de agua…”. Básicamente, la caldera funciona calentando agua que luego se bombea por toda la casa.
Con el correr de los años, los avances tecnológicos nos ofrecen calderas equipadas con novedosos sistemas de condensación que las hacen más seguras y eficientes desde el punto de vista del calor. Y también las convierten en equipos más respetuosos con el medioambiente.
¿Cómo funciona una caldera?
Esquema de una instalación centralizada de radiadores.
Las calderas consisten en un área sellada denominada quemador, donde tiene lugar la conversión del combustible o fuente de energía que hayamos seleccionado en calor. Una tubería de agua conectada al quemador circula dentro de la caldera y fluye hacia un intercambiador de calor. En el quemador ubicado en el interior de las calderas, el combustible (fuente de energía) se convierte en calor mediante combustión o una resistencia eléctrica. Adjunto a este quemador hay un tubo dentro de la caldera. A medida que se produce calor en el quemador, la tubería se calienta y, con ella, el agua en su interior.
Esta agua que ha sido calentada por las calderas fluye hacia un intercambiador. Este intercambiador tiene dos circuitos distintos: uno para calentar el agua de la calefacción y otro para el agua sanitaria. En el intercambiador, el calor transportado por el agua del circuito primario de las calderas se transfiere al agua sanitaria. Por lo tanto, la caldera habrá calentado el agua que fluye a través de las tuberías y que luego recibimos cuando abrimos la canilla. El mismo sistema se utiliza para el agua que fluye a través del sistema de calefacción: el agua se calienta por la combustión del quemador para luego llegar a los radiadores o piso radiante.
Esquema de una instalación centralizada de piso radiante.
¿Cuáles son los 5 beneficios de las calderas de calefacción central?
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Tamaño
Una gran ventaja de un sistema de calefacción central alimentado por caldera es que puede instalarse prácticamente en cualquier zona de la vivienda, debido a su tamaño compacto. Las calderas combinadas ocupan poco espacio en el piso, e incluso pueden instalarse en las paredes.
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Eficiencia
Actualmente, los sistemas de calefacción central son muy eficientes desde el punto de vista energético, ya que no suelen perder gran cantidad de calor. Como el aire no tiene que pasar por respiradores y cañerías, el ahorro de energía se traduce en mayor eficiencia calórica y una reducción significativa en las facturas energéticas.
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Costos
Los costos de una instalación sistema de calefacción central a partir de caldera son altos. Sin embargo, es considerada una de las mejores inversiones que se puedan llevar a cabo en la vivienda. En primer lugar, porque es un gasto que se irá amortizando en el tiempo ofreciendo un calor parejo y muy agradable en toda la casa. Y en segundo lugar, porque representará un incremento en el precio de venta dentro del mercado inmobiliario.
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Versatilidad
Un sistema de calefacción central a partir de caldera puede ser muy versátil ofreciendo así gran comodidad y confort. En el caso de un sistema de radiadores, por ejemplo, se pueden combinar las funciones de zonificación, toallero calentador de toallas, radiadores adicionales y muchas más. Todas estas alternativas convierten al sistema en algo sumamente conveniente y práctico.
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Respetuoso con el medioambiente
En todo el mundo, los sistemas de calderas son ahora una opción popular debido a sus beneficios ecológicos. También son una opción popular para las personas alérgicas, ya que la calefacción radiante reduce la transmisión de alérgenos y polvo en su hogar. Consejo adicional: las calderas son totalmente insonorizadas y reducen enormemente la contaminación acústica.
Con el correr del tiempo y los avances en tecnología, los sistemas de calderas se van puliendo en la búsqueda de una mejor eficiencia energética resultando en calderas ecológicas que utilizan menos combustible para la misma cantidad de trabajo.
Otro logro en la fabricación de calderas son las calderas de condensación. Aquí los gases calientes que se liberan después del primer ciclo, son reutilizados, por lo que las emisiones son mucho más bajas, generando un menor impacto medioambiental.
Recomendaciones
Es siempre recomendable comprobar los costos de compra, de calidad y de instalación de calderas antes de optar por una marca determinada. Puede haber una diferencia sustancial en precio y calidad entre una marca y otra. También es crucial la elección de la empresa o técnico de instalación, intentando buscar siempre fiabilidad y la buena reputación. Después de todo, la adquisición de un sistema de calefacción por caldera no es algo que realicemos muy a menudo.