En este artículo:
- ¿Qué es el monóxido de carbono?
- ¿Por qué es tan peligrosa una intoxicación por monóxido de carbono?
- ¿Cómo saber si hay monóxido de carbono en el ambiente?
- ¿Cómo me doy cuenta de que mi estufa a gas pierde monóxido de carbono?
- ¿Qué hacer si se ha inhalado CO?
- ¿Cómo se elimina el monóxido de carbono del cuerpo?
- Tips para prevenir la intoxicación por CO
El monóxido de carbono es un gas que está presente en nuestras vidas diarias a través de los humos expulsados por los caños de escape de autos, camiones y ómnibus, candelabros, estufas, hogares y otros sistemas de calefacción.
Muchas veces leemos noticias sobre la peligrosidad de este gas, pero rara vez tomamos verdadera conciencia del porqué de esta característica. Es importante conocer los motivos que convierten al monóxido de carbono en un gas de alto riesgo para la salud.
¿Qué es el monóxido de carbono?
El monóxido de carbono (CO) es un gas peligroso que no se puede percibir porque no tiene color, ni olor ni sabor.
Se produce cuando los combustibles como querosén, nafta, gas natural, carbón o madera se queman sin suficiente oxígeno, lo que provoca una combustión incompleta. El CO se encuentra en el humo de la combustión.
Esto parecería no tener importancia para nosotros, pero, la realidad es que nos toca muy de cerca porque puede enfermar e, incluso, matar.
Infografía
¿Por qué es tan peligrosa una intoxicación por monóxido de carbono?
Una larga exposición a este gas puede reducir la capacidad de la sangre para transportar oxígeno y generar una intoxicación por monóxido de carbono. Cuando la sangre ya no es capaz de transportar oxígeno, las células y los tejidos del cuerpo fallan. Los síntomas que podemos observar son: dolor de cabeza, mareo, dificultad respiratoria, desmayo, convulsiones, coma y la muerte.
Todos estos síntomas de intoxicación se pueden percibir tanto en nosotros como en nuestras mascotas. Todos somos vulnerables a los efectos nocivos del CO.
¿Cómo saber si hay monóxido de carbono en el ambiente?
Existen las alarmas de monóxido de carbono que sirven para alertar rápidamente ante la presencia de CO en el ambiente. En Argentina hay una gran variedad de marcas y diseños que permiten detectar el monóxido de carbono originado desde cualquier fuente de combustión defectuosa, pero no pueden prevenir sus emisiones tóxicas.
Detector de CO
¿Cómo me doy cuenta de que mi estufa a gas pierde monóxido de carbono?
Hay algunas señales que pueden hacer sospechar la presencia del CO en el ambiente, tales como: llama de color amarilla o naranja, en lugar de la azul normal. Esta es la primera señal de que la estufa no funciona bien y envía monóxido de carbono al ambiente.
¿Qué hacer si se ha inhalado CO?
En todos los casos, abrir ventanas para evacuar el monóxido de carbono del ambiente. Salir del ambiente cerrado y buscar un lugar abierto en donde corra aire fresco. Si la exposición al gas ha sido larga, habrá que recurrir a los servicios asistenciales.
¿Cómo se elimina el monóxido de carbono del cuerpo?
Si la ingesta de CO ha sido grande, el paciente debe ser conducido al hospital en donde se realizará un tratamiento de salvataje. Este tratamiento consiste en respirar oxígeno puro en una cámara de aire de alta presión. Esto acelera el reemplazo de monóxido de carbono con oxígeno en la sangre. Esta terapia se usa en casos de intoxicación grave con monóxido de carbono.
Tips para prevenir la intoxicación por CO
- Comprobar o cambiar las pilas del detector de CO cada seis meses. Si no tenemos un detector de CO, comprar uno.
- Revisar anualmente con un gasista matriculado el sistema de calefacción y cualquier otro aparato a gas que exista en la vivienda.
- La llama del gas de estufas y cocinas siempre tiene que ser azul. Si es amarilla, anaranjada o roja el artefacto de gas está funcionando mal.
- No entorpecer ni obstruir la emisión de calor de los artefactos a gas.
- Mantener las rejillas de ventilación y los conductos de humos abiertos y libres de residuos que pudieran bloquearlos.
- Los artefactos de gas instalados en baños o dormitorios solo deben ser de tiro balanceado.
- Revisar anualmente con deshollinador las chimeneas de la vivienda.
- Nunca dejar el motor de un vehículo estacionado en marcha dentro de un espacio cerrado o parcialmente cerrado, como un garaje.
- Nunca hacer funcionar un vehículo de motor, un generador, una lavadora a presión o cualquier motor a nafta o gasoil en un espacio cerrado o semicerrado sin estar cerca de una ventana abierta, una puerta o un conducto de ventilación por el que puedan salir los gases de escape.
Si somos cuidadosos y seguimos todos estos consejos de prevención, evitaremos sin problemas cualquier tipo de accidente causado por inhalación del peligroso monóxido de carbono.